Los beneficios de la lactancia materna

Introducción

La lactancia materna es uno de los temas que más controversia genera entre mujeres y profesionales. No hay duda alguna de que es la forma más natural y saludable de alimentar a nuestro bebé. Sin embargo, debido a los falsos mitos, desinformación y mala o falta de orientación por parte de algunos profesionales, hoy en día la lactancia materna sigue siendo un dilema para muchas mujeres, que no saben si seguir ese camino será el adecuado, o, por el contrario, se convertirá en un camino de espinas. Si estás embarazada y piensas en qué será mejor para tu bebé, este artículo es para ti. La lactancia materna tiene muchos beneficios, tanto para tu bebé como para ti. ¿Quieres saber cuáles son? Te los cuento a continuación.

Beneficios para el bebé

La leche materna es el alimento más adecuado y completo para el bebé, ya que se adapta a sus necesidades cambiando en función de su edad, el momento y las tomas

El calostro es la primera leche que toma el bebé y es rico en proteínas, anticuerpos y otros componentes, como factores de crecimiento. Después, se produce la bajada de la leche, la cual, se compone de una primera porción más líquida (rica en lactosa), y otra porción más densa (rica en grasas). De esta forma dependiendo de cómo y cuánto tome el bebé, estará obteniendo una composición distinta. Por último, a medida que el bebé crece, la composición de la leche también se adapta, por ejemplo, aumentando las calorías para aportarle más energía.

La leche materna protege al bebé de enfermedades e infecciones, como las respiratorias, las gastrointestinales, las alergias, el asma, la diabetes y la obesidad

Esto es gracias a los anticuerpos que la madre le transmite al bebé a través de su leche. Al contrario de lo que muchos piensan, cuando la madre está enferma y el bebé toma pecho, se está inmunizando frente al proceso infeccioso que esté atravesando la madre.

La leche materna favorece el desarrollo cognitivo, emocional y social del bebé, ya que estimula su cerebro, su vista, su oído y su tacto

Por ejemplo, la leche materna contiene ácido docosahexaenoico (DHA), que contribuye a la formación de las membranas neuronales y la mielina.

La leche materna refuerza el vínculo afectivo entre la madre y el bebé, ya que favorece el contacto piel con piel, la mirada, el olor y el calor

Durante la lactancia, la madre y el bebé se miran, se tocan, se hablan y se acarician, estimulando la producción de oxitocina y prolactina, que facilitan el amor, la relajación y el bienestar. Y el calor que le transmite la madre durante el contacto piel con piel regula la temperatura del bebé.

La leche materna ayuda al bebé a regular su sueño

Además, del sueño regula su apetito y su estrés, ya que contiene sustancias que inducen al sueño, la saciedad y la relajación. La leche materna contiene melatonina, que favorece el sueño del bebé.

Beneficios para la madre

La lactancia materna ayuda a la madre a recuperar su figura después del parto, ya que quema calorías y reduce el tamaño del útero

Para la producción de leche, la madre gasta unas 300 calorías más, por lo que favorece la bajada de peso. Además, la succión del bebé aumenta los entuertos, con lo que el útero recupera su tamaño mucho más rápido y de forma natural.

La lactancia materna previene el sangrado postparto, la anemia, la depresión postparto y el cáncer de mama y de ovario

Como acabamos de explicar, la liberación de oxitocina favorece la expulsión de la placenta y la recuperación del tamaño del útero,  lo cual, reduce el sangrado. Esta hormona, junto a la prolactina, tienen un efecto antidepresivo y ansiolítico, disminuyendo el estrés y la depresión postparto en la madre. La lactancia materna, a su vez, reduce los niveles de estrógenos, reduciendo consigo las probabilidades de desarrollar cáncer de útero y de ovario.

La lactancia materna facilita la anticoncepción natural, ya que retrasa la ovulación y la menstruación

La succión del bebé hace que se libere prolactina, la cual, inhibe la liberación de otras hormonas que intervienen en la ovulación. Sin embargo, es importante saber que, a pesar de evitar la ovulación y la menstruación, no debemos usar la lactancia materna en si como método anticonceptivo.

La lactancia materna ahorra tiempo y dinero

Si le das pecho a tu bebé no requieres de preparación ni compra de biberones, tetinas, leches artificiales ni esterilizadores.

La lactancia materna aumenta la autoestima y la confianza de la madre

Esto se debe a que le hace sentir capaz de alimentar y cuidar a su bebé.

Mi experiencia personal en cuanto a los beneficios de la lactancia materna

Como ves, la lactancia materna tiene muchos beneficios tanto para ti como para tu bebé. Como madre que ha optado por la lactancia materna exclusiva, puedo darte mi opinión personal sobre los beneficios que he notado, siendo totalmente sincera. Quédate a leerlos.

- Si bien es verdad que yo no cogí mucho peso en mi embarazo, cundo di a luz me quedé con 4 kilos de más. En tan sólo 3 semanas ya los había bajado. Pero hay que tener cuidado porque dar el pecho te da un hambre voraz y si no lo controlas, los kilos pueden volver rápidamente.

- El sangrado postparto era algo que me preocupaba. Me daba miedo manchar mucho y no poder curarme bien la zona o incluso llegar a tener anemia por la pérdida de sangre.  Nada más lejos de la realidad. Yo ya me había anticipado y tenía compresas y braguitas para el postparto, y al final, me sobraron la mitad. Tuve un manchado no muy superior a una regla normal y en 3 semanas cesó completamente.

- Que decir de no tener que preocuparte por la molesta menstruación. Cada mujer es un mundo (para esto y para el resto, claro está) pero en mi caso, mi niña va a cumplir 4 meses y sigo sin tener noticias suyas.

- Tiempo no sé, pero dinero, puedo asegurarte que te lo ahorras y viene de perlas. No te puedes hacer a la idea de todo el dinero que se va en pañales.  Por no hablar de que si sales a la calle y tu bebé tiene hambre es tan fácil como sacarte el pecho y listo el self-service. He visto a madres preparar un biberón en la calle y es todo un espectáculo.

- En este último punto discrepo un poco. No te voy a mentir, la lactancia materna, aunque consigas que funcione bien a la primera, es dura. Hay momentos en los que mi hija y yo somos uno y es mágico. Y hay otros en los que parece una pelea constante entre el pecho y ella. Esto hace que haya días que sienta que le estoy fallando a mi niña. Te surgen muchos miedos e inseguridades, pero luego miro sus rosquillitas y sé que lo estamos haciendo bien.

Conclusión

En resumen, y por si todavía no he conseguido convencerte del todo, la lactancia materna está llena de beneficios y en los momentos difíciles, recuerda que no estás sola en esta aventura. Puedes contar con el apoyo de tu pareja, tu familia, tus amigas, tu médico o tu asesora de lactancia.

¿Qué te ha parecido el artículo? ¿Te ha resultado útil e interesante? ¿Te gustaría que escribiera más artículos sobre otros temas relacionados con la maternidad? Puedes dejarme tus comentarios o sugerencias abajo. Me encantará leerlos y responderlos. 😊